Lógico sería pensar
que el ser humano por naturaleza busca la esperanza de ser o llegar a
convertirse en algo y alguien mejor. “Algo”, porque de alguna extraña manera
todos terminamos siendo objetos del otro, del que no nos entiende. Lógico sería
pensar, que toda persona quiere lo mejor para sí y para su entorno, ya que sólo
así ella podría estar tranquila en su mundo, con los que la conocen y los que
la estiman y quieren. Esta persona, entonces, trabajaría para que la gente a su
alrededor se sienta cómoda con su presencia, ya que ésta, se preocupa por lo
demás y siempre está atenta a sus necesidades y las de los otros. Por eso,
sería lógico pensar, que esta persona, siendo una gran persona se convierta en
la líder de la comunidad y el barrio y organice eventos para compartir con
todos los vecinos, para que el esos momentos especiales la gente se encuentre y
le dé sentido a su existencia.
Sí, sería lógico, y
además lindo, poder establecer que ella, entre todos nosotros es la persona que
une al grupo y le da cohesión, la que por sí sola está pendiente de todos y se
encarga de que nada les falte. La que va y enfrenta a las autoridades cuando en
el barrio hay algún problema, la que organiza a los vecinos para realizar colectas
para los damnificados de los desastres naturales, la que junta dinero extra
para pagarles a los encargados del mantenimiento, la que entiende y escucha a
los demás, la que está abierta a las quejas y soluciona aquellos problemas, la
que comprende cuando se ha equivocado y pide perdón cuando es necesario, la que
pone a dos enemigos a hablar y logra que se reconcilien, la que,
lamentablemente todavía no aparece en nuestro barrio.
Sería lógico, por
lo tanto, pensar, en que, yo, vecino del barrio, y ciudadano preocupado por el
bienestar de mi prójimo y como buen cristiano, me dedique, y haya hecho de
ello, mi profesión, a buscar a la persona indicada para cubrir esa vacante en
mi barrio. Sería lógico entonces que el barrio escuche mis ideas y me conceda
una oficina especial, hecha a mi medida, para realizar mi labor como Procurador Barrial para la Búsqueda del Encargado/a
de la Gestión y Construcción del Bienestar y Bien-vivir del Barrio. Por lo
tanto, sería lógico, que, como Procurador Barrial, yo, salga constantemente del
barrio y me dirija hacia otros lugares y horizontes acompañado de una asistente
que anota todos mis pensamientos para que una vez encontrados 100 personas
capacitadas para el puesto se pueda realizar una auditoría y un concurso
especial, para el cual se conseguiría a cinco jurados especiales para
dictaminar la capacidad, solvencia, ética, moral y buen juicio de los
postulantes al cargo de Encargado Barrial
para el Bienestar y Buen-vivir.
Es por ello, y
resulta lógico, que, en mis innumerables viajes por la ciudad, el departamento,
el país, el continente y el mundo, me haya encontrado con todo tipo de personas
extrañas, amigables, detestables y sobretodo, poco calificadas para un puesto
tan importante en la construcción del bienestar y la esperanza de un buen vivir
de mi barrio. Luego de una interminable búsqueda, mi asistente y yo hemos
podido encontrar gente en diferentes lugares, que para bien o para mal, lograr
ingresar dentro del perfil básico del Encargado
Barrial para el Bienestar y el Bien-vivir, y que, habiéndose hecho
merecedores de dicha mención, han sido citados a someterse a las pruebas
pertinentes del caso. Esto significa una verdadera alegría, ya que hoy, podemos
estar frente a los cien postulantes al cargo, y podremos evaluar cuál de ellos
será, la persona que velará por los intereses y sobre todo por la calidad de
vida de nuestro barrio. Un rayo de luz se asoma desde la oscuridad, momentos
antes del inicio del debate y mesa redonda con los diferentes postulantes.
Sería, entonces
lógico, que de cien postulantes al cargo de Encargado
Barrial para el Bienestar y el Bien-vivir, uno, aunque sea, se encuentre
capacitado para tal función y pueda ejercerla de ahora en adelante. Y, a mi
pesar, como ciudadano del barrio y la ciudad, y, como Procurador Barrial para la
Búsqueda del Encargado/a de la Gestión y Construcción del Bienestar y
Bien-vivir del Barrio, lamento informar, que ninguno de los cien
postulantes al cargo ofrecido, cumplen con los requisitos necesarios para ser
elegidos para cumplir sus funciones, y yo, como Procurador Barrial, debo admitir,
que le proyecto para encontrar a esta persona en cuestión, queda de momento
suspendido hasta encontrar nuevos horizontes en la solución del problema.
Atentamente. Natalio Ruiz.
Procurador
Barrial para la Búsqueda del Encargado/a de la Gestión y Construcción del
Bienestar y Bien-vivir del Barrio
Por Santiago Contreras Soux, Abril 2010
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